• El arte, la gloria, la libertad se marchitan, pero la naturaleza siempre permanece bella. Lord Byron
  • La verdadera sabiduría está en reconocer la propia ignorancia. Sócrates
  • La belleza de las cosas existe en el espíritu del que las contempla. David Hume
  • De las nubes más negras, cae agua limpia y fecunda. Proverbio chino

lunes, 26 de abril de 2010

Las Caderechas - cerezos en flor.


Al igual que la gente acude al Jerte a ver el espectáculo de los cerezos en flor, lo mismo ocurre en la comerca burgalesa de Las Caderechas.
Este prodigio de la naturaleza dura tan poco tiempo, que hay que ir en el momento adecuado.
Nada más llegar a Salas de Bureba, uno de los pueblos de acceso, se comienza a apreciar el espectáculo.
Paramos en Aguas Cándidas, luego en Hozabejas y en Rucandio dejamos el coche.
Comenzamos a andar dirección Madrid, y a la salida del pueblo, a la izquierda, tomamos la pista forestal, que sin pérdida nos lleva hasta Huéspeda, por los pinares, y donde la claridad del bosque lo permitía, pudimos disfrutar del paisaje.
Pero antes de llegar a Huéspeda, al pasar un cruce importante, entramos, a la izquierda, por un camino de color blanquecino cerrado por la vegetación, para contemplar una zona de caolín que hace años era explotado.
Ya en el pueblo, salimos por su calle principal hasta el aparcamiento, y, a la izquierda, tomamos el sendero que por el monte nos lleva hasta Madrid. Por esta zona todo el camino estaba jalonado de cerezos en flor, precioso.
Nos acercamos hasta Barrio de Mazuela y volvimos a comer a Huéspeda, esta vez por la carretera para, así, poder seguir disfrutando del magnífico paisaje.
La primavera, está claro, que ya llegó al campo, a los huertos y al monte.
Paseando por el pinar pudimos escuchar los trinos de los pájaros, pudimos ver, ya, las hormigas correteando, las abejas con su instinto suicida, las nubes de mosquitos que se te meten por la nariz y la clásica y petarda mosca cojonera que te dá el día. Animalitos de Dios, que alguien diría.
La naturaleza es bella, pero tiene sus inconvenientes en esta época del año y es que "la primavera la sangre altera" en todos los seres vivos deseosos de su procreación.

miércoles, 21 de abril de 2010

El sendero BU 104 ¡¡ cuidado !!

(Frías y valle de Tobalina)
Hoy los planes han salido todos mal.
Decidimos hacer la ruta circular 104 de Villanueva de los Montes, sólo que, comenzamos por Frías para luego, poder aprovechar la tarde y acercarnos a Herrán.
Con el planito en la mano, salimos de Frías en dirección Tobera, por la carretera y a los pocos metros tomamos el camino de la derecha, señalizado 104. En primer cruce nos envía a la izquierda, y en el segundo de frente. Pues uno de los dos cruces está mal, digo yo, porque desde ese momento desaparece la 104 y se convierte en la ni me acuerdo del número.
Siguiendo las marcas amarillas entramos en Tobera, salimos a la carretera y cruzamos el arroyo. Lo curioso es que el panfleto dice "9 claves para no perderse" JA. En el 9 dice "abandonar el tendido de alta tensión y con cuidado a la derecha". Pues como coincidía, seguimos.
Después de subir hasta la antena de televisión, bajamos, con la desagradable sorpresa de haber llegado a RANERA.¿ y ahora por dónde?.
Preguntamos al abuelete de turno que con muy malas maneras, reprochado por su señora por estar hablando con extraños, nos envía "por este camino to tieso sin pierde, llegando al cementerio, como hora y media de camino". Obedientes, nos pusimos en marcha. Nos encontramos marcas contradictorias, primero no, luego sí.....Decidimos hacer caso al "to tieso".
¿To tieso? ¿y ese cruce a derecha e izquierda, cuál tomamos? Izquierda, y ¿este otro cruce a derecha e izquierda? Derecha, porque lo que teníamos claro es que Villanueva estaba a la derecha.
No las teníamos todas con nosotros dentro del pinar, pero nos daba confianza el echo de que aquél camino tomaba una suave pero larga pendiente, vamos que, aquello llevaba a algún valle o tierras de cultivo.
Hubo suerte, la carretera y a la derecha Villanueva. Nuevamente señales contradictorias. La pintura marcaba a la izquierda y los paneles a la derecha. Tomamos la izquierda por aquello de que quién pintó hizo el recorrido, pero el que puso el panel, pensamos, ha podido ser un mandado que se limitó a hacer el trabajo sin más contemplaciones.
Y sí, por fin, bajamos a Quintanaseca dónde contemplamos, en la iglesia románica, una piedra de origen visigodo. La buscamos, informados como estábamos de su existencia(Zalez).
Terminamos el recorrido por la carretera al ver la cuestecita por la que teníamos que volver, y es que algunos ya llevaban ampollas y el cansancio era grande. Bueno, realmente más que por el andar por el nerviosismo y es que perderse en el monte.... no es plato de gusto.
Tengo que hablar con los que en la Junta se encargan de estas rutas. O la gente no las hace o no se quejan, pero yo voy a llamar, ya veremos que me cuentan.

domingo, 11 de abril de 2010

Cómo en los viejos tiempos

(Foto: al fondo Las Dullas)

Ya ni me acuerdo los ¿años? que han pasado desde la última vez que tuvimos que llevar 3 coches para salir al monte. Tanto invierno duro....., digo yo, que es lo que ha animado al personal. Me alegro.
Pero hay que transigir porque la gente no está en forma. Por lo tanto, un paseo, eso es lo que hoy hemos hecho.
Y es que no entiendo como no están hartos de tanta agua y agua y agua de este invierno para pedir ir a ver agua.
Por eso motivo, repetimos: Las Pisas.

Dedicado a los que no han visto mis entradas: Las Cascadas de Burgos I y II.

Hay que aparcar a la entrada de Villabáscones de Bezana. Bajamos al pueblo y a la izquierda, señalizado, comenzamos la marcha. Si ha llovido mucho hay que tener cuidado porque una de las cascadas vierte sus aguas sobre el sendero.
Hoy no era el caso. Sin problemas llegamos a Las Pisas. La cascada principal, la más bonita, tan seca que a sus pies había un grupo numeroso almorzando; tan sólo se podía ver la surgencia.
Luego, de regreso, tomamos el camino que asciende hasta Soncillo, pero tan sólo llegamos hasta San Cibrián. Volvimos a Villabáscones por la carretera, más que nada, para evitar que V. M. y P. tuvieran que bajar por el monte, que tiene una expléndida pendiente.
Justo al entrar en el pueblo, tomamos el camino, primero de hormigón y luego de tierra, a la derecha, que conduce al Barrio de Arriba de esa localidad. Un traguito de agua fresca y reanudamos la marcha hacia el monte ( a la izquierda). Pasamos por un hayal, luego por unos hermosos prados y seguimos el camino que en teoría lleva a Leva. Pero al llegar al portillo decidieron comer. Mal asunto, pensé yo, porque con el estómago lleno defícil mover a éstos.
Y así fue. Comimos contemplando aquel pequeño valle que tenía como telón de fondo, Las Dullas.( En la foto lo podéis ver). Nos duró la parada hora y media; impensable en otras ocasiones.
Y vuelta a los coches. Distancia recorrida... yo creo que no más de 8 km., aunque se me han hecho eternos por lo despacio que íbamos.
Para acabar la jornada un pequeño desvío hasta Urbaneja del Castillo, porque claro, seguían pensando en el agua. "Total si es un desvío de nada".
Pero, aún así, llegamos a casa prontísimo, a las 6.
Bueno, otro día será. Insisto, más fotos en mi otro blog.

martes, 6 de abril de 2010

De Cillaperlata a Cillaperlata

(Foto: Al fondo el Valle de Tobalina)
El sendero de hoy lo podríamos dividir, digamos que, en tres tramos muy diferenciados.
El primero de Cillaperlata a casi el Alto Miradores, de suave, continuada y al final una dura subida.
El segundo hasta una cancela de espino. Todo el camino pisando uma mezcla olorosa compuesta de agua, tierra y pastelitos que una vez bien amasado por las pisadas del vacuno y por el paso de tractores o 4x4 dan como resultado una pista de alunizaje.
El tercero, una senda muy angosta que me da que la utilizan más bien poco porque el boj, el pinar y la maleza van tomando el espacio a la altura de los ojos del caminante. Este tramo acaba en una fuerte pendiente.
Total, aunque viene en la panfleto que existe una laguna en el, que yo califico, segundo tramo del recorrido, no la he visto porque iba demasiado pendiente de ver dónde ponía los pies después de un fallido intento de ir al ¿suelo? ¿ o tal vez ciénaga?; y es que, sinceramente, no me apetece para nada llenarme de ciertos perfumes, además había muchos ojos mirando fijamente a lo largo de ese trayecto con unas cornamentas dignas de toros de lidia a tan sólo 2-3 metros de distancia y no dejaban demasiada cabida a la relajación en el paseo.
Buscamos, sin fruto, lugar apartado para comer y por fin "ahí junto a esas ruinas". Ya, ya, allí, claro, no había cornamentas sueltas ¡ cómo las iba a haber si todo el prado era un pastel ! ¡ vaya festín para el escarabajo pelotero !. Total que tuvimos que comer el bocadillo con un perfume ambiental que yo creo que fue el culpable de que se estropeara el delicioso café con leche que acostumbro a llevar para entrar en calor (léase irónicamente, pero es cierto, hoy se cortó la leche).
Por cierto, ya en el pueblo me dijeron que esa zona suele estar muchas veces así sobre todo si ha habido en días anteriores abundante lluvia; así es que ojo al dato a los andarines, que tengan en cuenta el tiempo de los días anteriores al paseo.
Acabamos la jornada bajando a ver la presa del pueblo. Nos acercamos a Pedrosa de Tobalina a ver el salto de agua y de regreso, en el Cañón de la Horadada, nos paramos para ver las Cuevas de los Portugueses que se encuentran junto a la carretera. En la indicación a Tartales, justo antes de comenzar la subida; están ahí mismo.
Cenobio visigodo o tal vez del alto/medievo; recibe el nombre por haber sido ocupado por portugueses que trabajaron en la obra hidraúlica de Trespaderne.
Y como siempre toca, la información gráfica aquí.

jueves, 1 de abril de 2010

¡ SE ACABÓ !

Y nunca mejor dicho.
Sí, hasta con exclamación, se acabó el cursito del Ecyl que mira que ya me tenía ¡¡HARTA!!.
Aprender... por supuesto, siempre se aprende, pero he acabado realmente cansada.
Ahora, en estos momentos, no deseo que nadie me hable de cursos que 700 horas, total para conseguir que te den un diploma al que supuestamente sólo tienen acceso los "aplicados" y los "asidúos". Pues no, no es verdad. El diploma en cuestión lo puede conseguir quién quiera, salvo que faltes muuuuchíiiiisimos días o que seas un auténtico vago.
La verdad es que el último mes me ha resultado muy cuesta arriba, básicamente porque la desorganización ha sido total: ordenadores que no iban bien, material que no llegaba, programas educativos que palmaban y medio funcionaban. Un auténtico desastre. Ha habido, algún día, que no he hecho, básicamente, nada.
Bueno, pues como ya tengo mi gran diploma, supuestamente, dice el personal docente, mis perspectivas de encontrar un curro han debido ampliarse enormemente, por eso orgullosa de mi hazaña me he encaminado al Ecyl con el papelito para inscribirlo en mi curriculum, mi tarjeta de demanda para que vean que existo y ¡ venga ! a figurar de nuevo como un parado, de los que entran en las encuestas, es decir, de los de verdad según el Sr. Corbacho.
Mientras tanto los días siguen pesando como losas y ya van 8 meses completitos cobrando paro. Pensaré que aún me quedan 16; mientras tanto cruzaré los dedos, pondré perejil a S. Pascasio y seguiré gastando parte de mi sueldo en folios, sobres y sellos.
Mi próximo paso, de seguir así, va a ser, aunque no me hace ninguna gracia, apuntarme en las ETT para conseguir algún trabajo en precario. Creo que los curritos volveremos a trabajar por cuatro duros; se acabaron los buenos sueldos para los que no hemos podido conservar nuestros anteriores puestos de trabajo. Dentro de poco sólo los más mayores, los que, repito, mantienen sus antigüos puestos de trabajo y los funcionarios, ganarán sueldos razonables y justos; los jóvenes y los que perdimos el tren sólo podremos acogernos a las sobras que serán pagadas con auténticas limosnas, realizaremos horarios vergonzosos, y gozaremos del NO apoyo sindical y encima sin derecho al pataleo por si viene otro y te quita el puesto.
Y mientras tanto la casta política pensando en subirme los impuestos y consintiendo en que, a partir de hoy, me cueste más calentarme, asearme y poder llevarme algo caliente al estómago.