Después de un largo parón, por motivos ajenos a mi voluntad, retomo la saludable costumbre de escribir alguna cosilla en este mi blog.
En este tiempo de ausencia, nada importante que reseñar, salvo que sigo contando los días, mejor dicho, meses, que engroso las listas del paro. Dentro de poco la cuenta será hacía atrás, porque con la tontería ya son casi 14 meses viéndolas venir y sin perspectivas positivas. Eso sí, no me contaron en las estadísticas de Julio, porque, claro, si tú te quieres ir tranquila en el sentido de que no te avisen para nada (nunca lo hacen, pero igual...por tocar las...) hay que ir a pedir, digamos que, las "vacaciones". Claro está, te dan una nueva tarjetita para fichar el día que vuelvas a casa. ¡ SI ES QUE ESTOS POLÍTICOS SON DE UN INTELIGENTE!.
Pero por suerte, la gente que bien me quiere (eso quiero pensar, aunque nunca se sabe pues tengo alguna que otra mala experiencia y además de supuestos "amigos"), me ha animado a hacer una pequeña escapada para que, así al cambiar de aires, la mente se disperse y no piense siempre en lo mismo.
Sinceramente, no necesito que el empujón sea muy grande para lanzarme a hacer algo que de siempre me ha gustado: viajar, a mi manera, pero viajar.
Pero este año celebramos, excepcionalmente, cónclave en torno a una paella y de él salieron los siguientes acuerdos:
- 5 viajeros ( overbooking).(Obligado llevar el "chalet" familiar y más equipo).
- ¡¡¡ playa !!! ( gggrrrr).(3 votos a favor, un "me da igual" y el mío que quedó en saco roto)Destino: Águilas. A buscar el bañador que ya no sé dónde podía estar después de tantos años que hacía que no pisaba la playa.
- la 1ª de Agosto. (otro grrrrr).(Jamás me ha gustado esta fecha para salir de vacaciones)
Vamos, que en la reunión me salió la cosa redonda. Me han dejado sin ganas de convocarla el próximo verano.
Pero en vez de mosquearme pensé preparar una pequeña venganza. Por eso, a la ida, cuando todo el mundo llevaba en mente darse un chapuzón esa misma tarde, al llegar a la altura de La Mancha el coche, por arte de magia, se desvió de la E5 y así me dí el placer de contemplar:
Los molinos de Campo de Criptana
Tembleque
Puerto Lápice
El corral de comedias de Almagro.
Dormimos en esta localidad y al día siguiente tomamos dirección Puertollano para ver
el Castillo y Sacro Convento de Calatrava la Nueva
pasando junto al complejo petroquímico.
Por fin llegamos al camping en Águilas. Acampamos y nos fuimos todos, toallas y bañadores incluidos, a ver la playa que la teníamos a unos 200 metros. Pero resultó ser un cala guarra (esa es la palabra exacta que la describe a la perfección, cualquier otra palabra no la definiría con exactitud), yo ya lo sabía pero no les dije nada. (¡qué satisfacción la mía viendo sus caras!).
Casi casi hubo bronca "que si dónde nos has traído, que vaya m--rd- de sitio, encima de lo que nos hicistes ayer". Mientras tanto yo me lo estaba pasando..... Todos protestaron sobremanera; todos menos los que saben que suelo organizar bien las cosas. Al día siguiente les llevé a la auténtica playa que, efectivamente, está a 200 metros pero en otra dirección. Y luego a la siguiente cala y a la siguiente dándonos un buen paseo, así pudieron elegir playa a la carta.
Y para dar gusto a todos, por las mañanas playa y piscina con jacuzzi y por las tardes turismo.
Visitamos:
Mojácar
Lorca
Por supuesto, Águilas
Cabo Cope
Vélez Blanco
Vélez Rubio
En fin, las vacaciones de este año cortitas, pero suficientes para que durante una semana se me olvidara mi situación laboral. Y es que estar con tanta tropa, inusual en los últimos años, ha hecho que no me dé tiempo a pensar en nada más que el día a día.